Bibliotecarios
del Meta se reúnen en Villavicencio
Septiembre 15 de 2017
La academia apaga el gusto por la lectura; desde la
institucionalidad la defienden, pero no saben por qué ni para qué; la sociedad
la promueve, pero no lee; caemos en moralismos y creemos que leer nos hace
mejores personas; los bibliotecarios le temen a las tecnologías y los cargos en
bibliotecas se ‘politizan’. No hay estabilidad.
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| El II Encuentro Departamental de Bibliotecarios se realiza en la Casa de la Cultura de Villavicencio. |
Esas son algunas de las reflexiones planteadas durante el
II Encuentro Departamental de Bibliotecarios del Meta, organizado por la
coordinación de la Red de Bibliotecas Públicas y que terminará hoy en la Casa
de la Cultura de Villavicencio.
¿Qué tan peligrosa es la lectura? Ese fue el punto de
partida de un taller adelantado ayer por Paula Castellanos, funcionaria del
área de formación de la Biblioteca Nacional de Colombia y quien aceptó la
invitación de la Red de Bibliotecas Públicas del Meta.
La jornada fue de reflexión y debate en torno a la lectura
y la escritura, en la que, entre otras cosas, quedó claro que para muchos
bibliotecarios las nuevas tecnologías son vistas como una amenaza, no solo en
el departamento, sino que es una realidad nacional, una conclusión a la que se
ha podido llegar luego de una serie de talleres realizados por la Biblioteca Nacional
en diferentes rincones del país.
También, la pasión y amor por la lectura ha caído en un
discurso. Muchos validan la lectura, pero no abren un libro, en los pasillos se
habla de la importancia de leer, pero no se hace de manera cotidiana. “La institucionalidad
defiende a la lectura, pero no sabe por qué, ni la usa en su diario”, expresó
Paula Castellanos.
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| Como parte del encuentro, la Biblioteca Nacional de Colombia lideró un taller sobre lectura y escritura. |
Para ella, el sistema educativo es uno de las grandes
responsables de que los más jóvenes no estén leyendo. Desde la academia proponen
textos poco estimulantes, nada motivantes ni interesantes para sus edades. “Entonces,
agrega, se vuelve obligatorio y nos mina un montón el camino hacia la lectura
placentera (…) Siento que la gente sale muy agotada de la lectura del colegio,
tienes 18 y no quieres leer porque ha sido una experiencia muy aburridora”.
El moralismo en el que ha caído la sociedad también se ha
convertido en una piedra en el zapato a la hora de estimular la lectura y
acercarse a ella. “Decimos que te va
ayudar a ser mejor persona, te va a construir, te va ayudar con el lenguaje,
te va ayudar a pensar mejor, pero no necesariamente es así, yo no leo para ser
mejor persona, yo Paula, yo leo porque me encanta meterme en otras historias,
meterme en vidas distintas a la mía, me encanta, entonces, creo que decir que
la literatura y lectura te van a hacer mejor, es una gran falsedad, creo que
hay que atenuar eso un montón y llenarlos de contenido”, agregó.
La funcionaria también hizo una reflexión sobre el
trabajo que se está haciendo desde las bibliotecas públicas, un trabajo que, en
muchas ocasiones, se pierde porque sus bibliotecarios son cambiados con
frecuencia. Entonces, “a un bibliotecario nuevo toca de nuevo volverlo a
sensibilizar sobre temas de lectura y escritura y enamorarlo para que siga por
su propia cuenta, y hay varios factores que han hecho que la lectura se vuelva
como un eslogan y se ha perdido mucho contenido”, concluyó.
El II Encuentro Departamental de Bibliotecarios del Meta,
que comenzó el 12 septiembre, terminará hoy en la Casa de la Cultura Jorge
Eliécer Gaitán, en una jornada que se extenderá desde las 8:00 de la mañana
hasta las 6:00 de la tarde.
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