Desempolvan las recetas de Felicidad
Agosto 29 de 2019
Felicidad Barrios siempre fue conocida y ahora que no
está será recordada por su generosidad en la cocina.
Sus familiares ahora producen las recetas que dejó doña Fela. Fotos: Óscar Fabián Bernal. |
Durante toda su vida se encargó de ayudar a todo aquel
que lo necesitaba, donó las tierras para la construcción de la Universidad de
los Llanos y la Universidad Minuto de Dios, adicional a esto fundó las veredas
Barcelona, El Cocuy y un barrio que lleva el apellido de su esposo italiano,
Lomónaco.
Lo que no todos conocen es que doña Felicidad Barrios o doña
Fela, como muchos le decían cariñosamente, era amante de la cocina y que les imprimía
esa misma generosidad que la caracterizaba, a todas sus preparaciones. Las
recetas que más recuerda su familia son el pan de arroz, los tungos de sal y de
dulce, el pollo alcaparrado, la torta gacho, el sabajón apolo, el masato, las
galletas de yuca y las almojábanas.
—Hasta sus últimos días ella cocinaba, le encantaba —advierte
Vicente Barrios, su sobrino.
Doña Fela falleció en el año 2013 a los 96 años, y su
familia y amigos recuerdan sus deliciosas recetas, en las que destacaban las cantidades
generosas de cuajada en proporción con la harina de sus amasijos.
—Por ejemplo, lo normal es una libra de arroz por una de
cuajada, ella no, ella le echaba tres de cuajada por una de arroz —resalta su
sobrino, quien recuerda con claridad cada preparación de su tía Fela.
Doña Felicidad, quizá con conocimiento de que los años
que le quedaban serían pocos, en el 2004 tomó la decisión de entregar sus
conocimientos gastronómicos a Cecilia Castellanos, la esposa de su sobrino
Vicente.
—Nos dijo que montáramos en nuestra casa una empresa de
pan de arroz, para que le ayudara a mi esposo, ella compró los ingredientes y
me dijo venga y le enseño —recuerda Cecilia.
Así, con el eslogan la receta de Felicidad, inició la
empresa Delicias típicas del llano, en el barrio 12 de Octubre, en Villavicencio,
y hace algunos meses se trasladó a una cuadra abajo del parque infantil, en el
hogar donde vivió Felicidad Barrios, que a su vez es una de las casas más
antiguas de la ciudad.
Actualmente, no solo elaboran allí pan de arroz, el que
fue su producto inicial, también han incluido otras de sus recetas, como tungos
de arroz salados y dulces, torta gacho, esta última de las preparaciones con
mayor demanda.
Es una empresa pequeña familiar, pero en el futuro
quieren verse como una industria capaz de brindar, además de productos de
calidad, toda una experiencia llanera para el comensal, poder transmitir la
historia y la cultura llanera a través de la gastronomía tradicional de los
llanos, y a su vez aprovechar el espacio cultural e histórico que representa el
hogar de doña Fela en Villavicencio.
De esta manera, aquella casa congelada en el tiempo,
seguirá siendo punto de encuentro para amigos que llegan a contar sus historias
en el mismo lugar donde doña Fela narró las de ella. La misma casa, la misma
receta de Felicidad.
Gabriela Gordillo Contreras
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