“Nuestra promesa fue honrarnos el uno al
otro, aunque alguno de los dos faltara”
Julio 10 de 2020
Ya han pasado seis meses desde el
fallecimiento del arpista Carlos ‘Cuco’ Rojas (q.e.p.d), quien fue el director
de la agrupación de música llanera Cimarrón y pareja sentimental de Ana Veydó,
vocalista.
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| Ana Veydó y Carlos Rojas (q.e.p.d.). Foto: Óscar Fabián Bernal. |
Después de lo acontecido, el grupo no ha
parado de trabajar, Ana Veydó pasó a ser líder de Cimarrón y continuó con
algunas responsabilidades que habían quedado pactadas.
Antes de que empezara la cuarentena, estuvieron
de gira en Reino Unido; los compromisos eran muchos, pero, los resultados
fueron significativos, ya que meses después obtuvieron uno de los premios
musicales más importantes en el mundo y ha sido el primer grupo colombiano en
ganar en los Songlines Music Awards 2020 en la categoría Mejor Grupo.
Este año, con la ausencia de Cuco, pero con
su recuerdo y la misma pasión compartida, Cimarrón será el invitado especial y realizará
la apertura del 52° Torneo Internacional del Joropo.
Ana Veydó abrió su corazón habló un poco
acerca de la situación actual de Cimarrón, el recibimiento de la invitación al
evento y el legado de Carlos Rojas.
Después
del fallecimiento de Carlos Rojas, ¿qué cambios tuvo la agrupación Cimarrón?
Siento que no podría hablar de cambios en
Cimarrón, porque precisamente la muerte de Carlos coincidió con la pandemia, un
evento mundial que ha interrumpido totalmente la vida artística.
En nuestro caso, nos vimos forzados a
cancelar nuestra gira de primavera-verano por Estados Unidos. Sin embargo,
tuvimos una primera experiencia de gira sin Carlos por el Reino Unido, entre
enero y febrero de este año. Debí liderar la banda sola, por primera vez, un
trabajo que durante veinte años habíamos realizado ambos. La ausencia de Carlos
implicó también pensar en un arpista que montara las obras musicales con los
arreglos tal como Carlos los concebía para Cimarrón.
¿Cómo
le dieron seguimiento al grupo?
La muerte de Carlos fue intempestiva y había
compromisos adquiridos con antelación, de manera que no hubo una pausa
artística para Cimarrón. Dos días después, tuvimos que viajar al Reino Unido
para hacer la gira de 15 conciertos junto a la arpista galesa Catrin Ana Finch.
No podíamos desistir de esta gira porque ya
casi todos los teatros reportaban la boletería agotada, como la Sala de la
Música de la Filarmónica Real de Liverpool y el centro cultural Lakeside de
Nottingham, entre otros. Pero, sobre todo, yo sabía que esta gira era el
homenaje más importante que podía hacerle a Carlos y podía también convertirla
en una prolongación de su despedida.
Así lo sintió el público en Inglaterra,
Escocia y Gales. Ha sido una de las giras más conmovedoras y a la vez de las
más exitosas de Cimarrón, esto fue reconocido con el premio Songlines Music
Awards como el Mejor Grupo del 2020 en el Reino Unido.
Usted
fue su compañera de vida por varios años, ¿qué significó la partida de él?
Durante estos 20 años juntos, lo que más
aprecié de Carlos, en lo personal y en lo afectivo, fue su capacidad de sentir,
pensar y de expresarse. Siempre vi en él una nueva masculinidad; un hombre
respetuoso, libre de prejuicios y capaz de entender el momento.
Siento también que perdí a mi gran aliado
profesional. Carlos era mi interlocutor más importante, confrontábamos
criterios y era la persona con la que todos los días reflexionaba sobre lo que
ambos hacíamos para enriquecerlo con el encuentro de nuestras dos visiones.
¿Cuál
es el legado artístico que dejó Carlos ‘Cuco’ Rojas?
Hablar del legado artístico de Carlos Rojas
tiene varios aspectos. En lo musical, propuso una reestructuración del joropo
en lo rítmico, llevando a un desarrollo orgánico de esta música desde sus
propias raíces. Esto es evidente en el surgimiento de diálogos melódicos entre
el arpa y la bandola o el tiple. Siendo consciente de la herencia africana e
indígena en el joropo, siempre propuso una manera propia de mezclarla, dándole
relevancia a los elementos con los que apostaba por una nueva sonoridad para el
joropo colombiano.
Amó y respetó tanto el joropo, que recurrió a
lo que esta música podía ofrecer por sí misma como expresión tradicional, sin
añadiduras. Además, dio un gran valor a los golpes tradicionales del joropo
hasta elevarlos a piezas sofisticadas, como es el caso de Zumbajam y Parranda
Quitapesares.
En lo pedagógico, fue Carlos quien creó las
metodologías de enseñanza del joropo en la región, con programas de estudio
avalados por el Ministerio de Cultura.
En lo intelectual, nunca estuvo ajeno a la
investigación y al cuestionamiento de lo que hoy se conoce como identidad
llanera.
Como
agrupación lograron llegar a muchas partes del mundo, pero, ¿qué meta le faltó
por cumplir a Carlos?
Tanto para Carlos como para mí, Cimarrón se
había convertido en nuestro propósito. Todo lo que queríamos lograr era a
través de Cimarrón y trabajamos para presentar nuestra propuesta en escenarios
inimaginables para el joropo. En el momento en que Carlos falleció, le habíamos
dado la vuelta al mundo en solo dos temporadas, desde julio hasta octubre.
Me hubiera encantado que Carlos disfrutara en
vida los últimos dos triunfos de Cimarrón este año: el premio Songlines Music
Awards del Reino Unido, ya que es un reconocimiento a las músicas de todo el
mundo, no solo de este continente; pero también la llegada de Cimarrón con su
joropo a la revista Forbes.
Es mi deber seguir en este propósito que
siempre nos mantuvo unidos, luchando por nuestras metas a lo largo de estos
años. Siempre serán reconocimientos y logros de los dos. Nuestra promesa fue
honrarnos el uno al otro, aunque alguno de los dos faltara.
¿Cómo
llegó la noticia de la invitación al Torneo Internacional del Joropo?
Nos informaron un día antes de que se hiciera
pública la noticia. Me sorprendió bastante, ya que los homenajeados casi
siempre son figuras que han hecho su carrera artística en la región.
¿Qué
significa para usted qué Carlos ‘Cuco’ Rojas sea el homenajeado en esta versión
52° del Torneo Internacional del Joropo?
Cada año, el torneo hace que aflore el valor
que tiene el homenajeado para la región. Me genera una gran expectativa saber
cómo mira la región a Carlos.
¿Qué
opina de que el homenaje lo realicen ahora y no cuando estuvo en vida?
Considerando que fue hasta el año 2019 que
Cimarrón tuvo la oportunidad de presentarse por primera vez en el Torneo del
Joropo y en los Llanos, después de una larga trayectoria internacional, la
verdad es que Carlos nunca esperó ni buscó un homenaje en ese espacio en vida,
pero creo que lo hubiera aceptado con mucho entusiasmo.
¿Qué
proyectos vienen para Cimarrón?
Cimarrón ya tiene proyectos para el 2021,
tocaremos por primera vez en Alemania, volveremos al Reino Unido, y estamos
soñando con regresar a los estudios de grabación para un nuevo álbum que esté
al nivel del éxito que ha sido Orinoco.
Gabriela Díaz
Agenda Hoy
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