Abogado Édgar Ardila asume defensa judicial del Instituto de Cultura del Meta

Nueva directora inicia con blindaje jurídico

Enero 22 de 2021

Luego de la serie de polémicas y críticas generadas por diferentes contratos firmados el año pasado en el Instituto de Cultura del Meta, y que incluso llegaron a ser debatidos en la Asamblea departamental, el ente cultural arrancó el 2021 con la contratación del abogado Édgar Enrique Ardila Barbosa, quien no solo será uno de los asesores jurídicos, sino que asumirá la defensa judicial del ente cultural, tal como quedó estipulado en el primer proceso contractual firmado en el presente año.

Las oficinas del Instituto de Cultura del Meta están ubicadas en el teatro La Vorágine de Villavicencio. Foto: Óscar Bernal

Se trata, además, de la primera contratación realizada por Camila Arismendy, quien pasó de ser la gerente de la Lotería del Meta a reemplazar a Mireya González en la dirección del Instituto de Cultura, convirtiéndose en la tercera funcionaria que pasa por ese cargo en tan solo 13 meses.

Según el contrato de prestación de servicios profesionales 01 de 2021, Édgar Ardila recibirá 9 millones de pesos, cada mes, durante los próximos seis, para un total de $54 millones, y entre sus funciones están: prestar servicios en el área jurídica, revisar los actos administrativos y asumir la defensa judicial del Instituto de Cultura.

En objeto contractual se estipula también que la defensa jurídica es externa.

Édgar Ardila había representado recientemente a Winston González, exsecretario de Prensa de la Gobernación del Meta, para que este regresara a su cargo luego de haber sido sometido a una moción de censura en la Asamblea del Meta. Sin embargo, la acción de tutela interpuesta por el abogado fue negada por un juzgado tras encontrar que la corporación había actuado dentro de los parámetros legales.

Édgar Ardila, abogado del Instituto de Cultura del Meta.

Al equipo de asesores jurídicos del Instituto de Cultura también se han unido, hasta el momento, Gina Paola García Guevara, con un contrato de 48 millones, por ocho meses; y María José Falla García, como auxiliar jurídica, con un contrato de 18 millones, por seis meses. Y como acompañamiento a la dirección, la nueva directora firmó un nuevo contrato por 66 millones de pesos, por 11 meses, para vincular a María Fernanda Castro Melo.

Hasta el momento, la dirección del Instituto de Cultura del Meta no ha confirmado si existe algún proceso judicial en curso.